José Jara es una de las máximas promesas de la natación. Lo demostró batiendo un record del número uno, Meolans, con sólo 14 años. Ahora sueña con “alcanzar un Juego Olímpico”.
Sale de la pileta con buena predisposición, aunque es allí donde mejor se siente. Se cambia enseguida, y avanza hacia una sala vacía en el club Defensores de Banfield para charlar “tranquilo” con Info Región sobre su exitoso presente y sus sueños, lejos de las brazadas, las patadas y los ruidos en el agua.
Sale de la pileta con buena predisposición, aunque es allí donde mejor se siente. Se cambia enseguida, y avanza hacia una sala vacía en el club Defensores de Banfield para charlar “tranquilo” con Info Región sobre su exitoso presente y sus sueños, lejos de las brazadas, las patadas y los ruidos en el agua.
El nadador José Jara tiene 14, pero aparenta un poco más. “Siempre me lo dicen” cuenta al comenzar la entrevista. Sonríe a cada instante y se muestra entusiasmado con su futuro. No es para menos, en su última actuación le quitó un record a José Meolans.“Todavía no puedo creer todo lo que me está sucediendo. Empecé para divertirme y a medida que pasó el tiempo me lo fui tomando más enserio.
Hoy tengo muchas expectativas”, comentó el chico que representa al Instituto Municipal del Deporte de Lomas de Zamora (IMDEP).
El juvenil deslumbró al mundo de la natación al batir el record de los 50 metros mariposa en la categoría cadetes en un torneo realizado en Uno Bahía Club (Bahía Blanca). Allí, alcanzó el tiempo de 25’ 92’’ y despojó del trono a Meolans que desde junio del 1993 ostentaba una marca de 26’ 37’’.“
Fue algo fabuloso. Ni mi entrenador (Joel Fiumara) ni yo nos imaginábamos que podía suceder algo así. Cuando terminé la carrera y dijeron por micrófono que había superado el récord de Meolans, que es mi ídolo, no lo podía creer. Pero al mismo tiempo, son las cosas que me hacen sentir feliz y me ayudan a entender que todo el esfuerzo que hago es válido”, expresó.
Además de superar a Meolans -que no es poca cosa- Jara bajó los tiempos existentes en su primer año en la categoría cadete.
Asimismo, se subió a cuatro podios en seis competencias corridas. “No es algo usual lograr un record nacional en el primer año en una categoría, siempre se dan en las segundas temporadas”, explicó Jara. Y encima, en la especialidad que más lo atrae “A muy pocos les gusta esta forma de nadar porque es cansadora, pero a mí me encanta”, confesó. Aunque con esta performance terminó de candidatearse como una de las grandes promesas argentinas, los logros de Jara comenzaron mucho antes: en su corta carrera acumula seis campeonatos nacionales (el último disputado en Paraná, Entre Ríos).
Es que, además de su talento, reúne las virtudes de los grandes deportistas: perseverancia, sacrificio y amor propio. Entrena seis veces por semana –de lunes a sábado tres horas por día- y deja muchas cosas de lado para mejorar.“Voy al colegio, salgo, como y me vengo a entrenar (alterna entre la pileta del Polideportivo Municipal y Defensores). Mis amigos siempre me dicen que soy demasiado fanático. Pero después me entienden porque cuando a uno le gusta tanto algo, se compromete y ahí llegan los logros”, comenta el chico.
Jara es chaqueño y se le nota en su forma de hablar: tranquila, relajada. Aunque el acento ya casi se le ha borrado después de ocho años de vivir en la zona sur del Gran Buenos Aires.Vino a parar a Lomas de Zamora porque su madre “conoció a un señor”. “Se enamoraron y nos vinimos para acá. Encontramos una casa muy linda cerca del Parque y nos quedamos. Tenía seis años y me costó un montón adaptarme porque allá estaba toda mi familia”, cuenta con algo de nostalgia.
Poco después de instalarse, comenzó a entrenarse en Banfield inducido por un amigo que conoció en un verano en Bariloche. “Nadaba bárbaro y yo lo admiraba. Le decía ‘mamá mirá como nada, quiero aprender a nadar como él’”, cuenta sonriente. Y continúa: “Me re esmeraba para igualarlo. Tanto, que muchas veces estuve a punto de ahogarme”.
“Encontramos la pileta del club Defensores que estaba muy buena, era económica y encima con linda gente. Un día me vio Joel y le pidió a mi mamá si podía venir más seguido. Y ahí arranque a competir”, completó José. Y nada mal le ha ido hasta ahora. Sus próximos objetivos serán clasificarse al Sudamericano del próximo año –aún no tiene sede- en el selectivo que se realizará en febrero en Mar del Plata.“Si mantengo los tiempos de ahora, puede irme bien, pero no hay que confiarse. Nada es fácil”, avisó.
Si bien quiere ir despacio y “disfrutar de la natación”, sus sueños van mucho más allá del Sudamericano. “Me ilusiono con llegar a un Juego Olímpico, es el sueño máximo de todo deportista”, confió.
Llega el turno de las fotos y luego Jara se sumerge dentro de la pileta. Desde allí se sonríe más que nunca…
1 comentario:
Felicitaciones José, es un gusto poder "entrenar" con vos.
Un abrazo
Daniel R.
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