Speedo. Pruebas secretas en Camberra

Michael Phelps no quiso hacer declaraciones a los periodistas que lo esperaban a la entrada del complejo de piscinas del AIS en Camberra donde se encuentra para realizar las pruebas de los prototipos de la que sería la nueva malla de Speedo que se usaría en los Juegos Olímpicos de Beijing.

Dentro de las instalaciones se encontró con Grant Hackett, Ryan Lochte, Katie Hoff, Natalie Coughlin, y los otros australianos Michael Klim, Jessicah Schipper, Alice Mills y Brenton Rickard.

Speedo no quería que se conociera este evento y declararon que se estaban haciendo más pruebas en el modelo que se usó en Melbourne es decir el FS Pro Fastskin.

Las pruebas se harán en la nueva piscina del AIS para aprovechar las ventajas del sistema de 16 cámaras de alta velocidad que proveen datos tridimensionales de lo que ocurre arriba y debajo del agua.

Una de las pruebas consiste en arrastrar a los nadadores debajo del agua a gran velocidad para analizar como esta reacciona con las nuevas mallas.

Phelps gana unos U$S 500.000 dólares al año con Speedo y hay un premio especial de U$S 1 millón si gana 8 medallas de oro en Beijing.