La noticia es insólita, pero altamente gratificante. Mientras la mayoría de los deportistas de elite nacional están planificando su meta olímpica en el exterior, Cristian Soldano decidió volver a sus raíces y buscar desde Salta la clasificación a una nueva cita con el Olimpo deportivo. La decisión no fue fácil. Dejar Brasil, el lugar que lo albergó durante los últimos seis años, y volver a una Provincia donde la infraestructura en natación es básica es a primera vista una mala jugada; pero para Cristian Soldano el decidir regresar es intentar algo que nunca se hizo en estas latitudes: demostrar que con trabajo se puede llegar a un Juego Olímpico. Cristian viene mostrando a lo largo de su vida deportiva que es capaz de derribar algunos mitos. Por ejemplo, a los 14 años dejó Salta detrás del sueño de nadar. Pasó por Santiago del Estero, donde consiguió la mayoría de sus títulos argentinos. Fue campeón sudamericano con 18 años. Pasó a nadar en Córdoba. Junto a José Meolans y Georgina Bardach armaron el mayo cisma de la natación cuando le dijeron no al entrenador Daniel Garimaldi (DT de la selección argentina) quien quería hacerles firmar un contrato de exclusividad con un club cordobés y donde se les exigía un porcentaje de dinero de sus ganancias. Pasó a Brasil y allí se recibió de licenciado en marketing aprovechando la beca deportiva que le ofrecieron por nadar en San Pablo. Pasó por ONAREP, Mogi, San Bernardo y Corinthians. Llegó a ser tercero en el ránking brasileño del estilo pecho. Pero lo más groso, fue lograr una plaza para los Juegos Olímpicos de Atenas. Fue el primer salteño después de 24 años en acceder a una gesta olímpica, y en los Panamericanos de Río de Janeiro quedó a sólo 9 centésimas de lograr el pasaje a Beijing 2008. Nunca en la historia del deporte salteño, hubo un atleta en dos Juegos Olímpicos consecutivos... y Cristian Soldano va por esa marca.
Fuente: Salta Deportes
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